Más de 100 personas están siendo perseguidas políticamente en Honduras, desde el 28 de junio pasado, la policía, fiscales del Ministerio Público y jueces, son utilizados para que emprendan acciones judiciales contra hombres, mujeres, menores de edad, con la intención de generar terror legal y desmovilizar a un pueblo que se resiste a la dictadura.
La represión directa inició desde el 28 de junio en que se perpetró el golpe de Estado contra el presidente constitucional Manuel Zelaya Rosales. Bala viva, de madera y de goma; gases lacrimógenos; toletazos, patadas, seguimiento, amenazas, vigilancia y hostigamiento, son entre otras las acciones contra la vida y la integridad física de las personas que han dicho no a los golpistas. ...leer mas...