viernes 04 de abril de 2008

Editorial ANARH sobre Gas del Caribe

Opinión Editorial (ANARH)
En un país democrático y de libre empresa, tenemos la tendencia a justificar violaciones a las leyes, con el argumento trillado de: “Esta empresa ya hizo esta importante inversión ya no es posible sacarla de aquí” y otro tipo de argumentos como la perdida del empleo, que son validos.
Quiero referirme al caso de la empresa Gas del Caribe, quienes operan una terminal de gas LPG en Omoa, desde ya hace muchos años. Desde que se anuncio la instalación de los peligrosos tanques Salchicha de Gas LPG, en la zona turística de Omoa, hubo una oposición muy fuerte, que se acallo metiendo a la cárcel a su líder el Suizo Ulrich Lang y comprando algunas voluntades en el gobierno de turno.
El ministro de Cultura y turismo de esa época, el Dr. Arturo Rendón Pineda, personalidad de conocida honorabilidad, se opuso y denuncio el daño que esa empresa la causaría a Omoa, Ganándose el despido del Presidente Azcona, 15 días después, Gas del Caribe obtenía supuestamente una autorización para instalarse, lo que hizo. Ahora se ha descubierto que esa supuesta autorización no llenó los requisitos de ley.
El 4 de Junio de 2006, la Dirección de Evaluación y Control Ambiental de la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente, SERNA después de semanas de averiguaciones y estudios, emitió el Dictamen No. 260, determinando que la operación de esa terminal “pone en precario la vida de ocho mil ciudadanos así como la Fortaleza de San Fernando y demás bienes de la población “.
“Adicionalmente -observa el Dictamen- se produciría una grave afectación a la Laguna de Centeno y a las especies de flora y fauna,
Y en caso de explosión una onda expansiva cubriría conservadoramente Un radio de 650 metros de destrucción total” alrededor de la planta.

Categóricamente concluye el documento: “A raíz de las investigaciones
Y de la información documental y fotográfica que obra en esta secretaria de Estado, habiendo verificado el incumplimiento reiterado
De las medidas de mitigación y demás obligaciones contractuales
por parte de Gas del Caribe, se determina que la empresa no puede continuar operando en la Bahía de Omoa ".

A la misma conclusión llegó la Comisión Parlamentaria formada por los veinte Diputados del Departamento de Cortés y presidida por el Doctor Rubén García Martínez, habiendo durante tres meses estudiado el caso y efectuadas numerosas inspecciones y confrontaciones entre las partes involucradas. Esta resolución fue a probada por el pleno del congreso nacional por unanimidad, mandando a reubicar la terminal de Gas del Caribe.
Las razones fundamentales por la que Gas del Caribe debe dejar de operar su terminal en Omoa son las siguientes.
1. Esta ubicada En plena zona turística, según Decretos Presidenciales del 1978 y 1982;

2. Esta Dentro de un casco urbano pre-existente; viola la ley del ambiente.

3. Esta Cerca de la Fortaleza de San Fernando, Monumento nacional y patrimonio de la Humanidad.

4. Está instalada En una playa falsa de relleno, sobre un manto de material orgánico y constantemente e socavada por un impredecible Mar Caribe;

5. Se ubica Sobre la siempre activa Falla geológica del Motagua, sin un diseño aprobado acorde con una zona sísmica.


Por otro lado, del Informe técnico DECA No. 286 del 2007, se desprende que “la empresa Gas del Caribe no se encuentra en condiciones de exhibir un solo diseño o estudio, induciendo a la conclusión que la colosal obra ha sido realizada en completa y criminal indiferencia respecto a elementales medidas de seguridad.”
También recuerda este último documento que "De acuerdo a la Ley General del Ambiente, nadie puede ejecutar obra o actividad
Susceptible de alterar o deteriorar el ambiente, sin que se haya aprobado la evaluación de impacto ambiental y se haya otorgado
La autorización correspondiente”. Gas del Caribe no cumplió con estas exigencias, antes de construir las 4 esferas para almacenar 8 millones de galones del peligroso Gas LPG en la zona turística de Omoa.

20 de Marzo de 2007 La Secretaria del Ambiente SERNA, manifestó que se identificaron “ al menos cincuenta impactos que pueden repercutir negativamente en la salud de las personas, en los bienes culturales de valor histórico y arquitectónico, en la belleza escénica
y en los recursos naturales marinos y costeros”, Aun así Gas del Caribe continúa operando en la Bahía de Omoa, en total desprecio de las Leyes nacionales y de los Tratados Internacionales suscritos.
Por otro lado, En el reciente recurso de amparo promovido por el Fiscal Luís Santos contra la Municipalidad de Omoa, el Juez del Contencioso Administrativo Mario Peraza ha ordenado como medida cautelar conformar en Gas del Caribe un SINEIA, “al fin de establecer la situación legal ambiental mediante informe actualizado”.
El Juez Peraza también mando a que “La Municipalidad de Omoa vigile a través de su Policía Municipal, que se permita el acceso a los ciudadanos, pobladores y turistas a las playas adyacentes a la Empresa, Gas del Caribe, para lo cual se deberá habilitar un paso seguro para los que las utilicen”. Medida que “No ha sido acatada por el Alcalde David Chavarría.
Con todas estas evidencias, de reiteradas violaciones a las leyes nacionales, es tiempo Ya que se proceda a ejecutar la reubicación de la terminal de Gas del Caribe en Omoa, ¿O es que es necesario tomarse las carreteras y quemar llantas para que se cumplan las leyes?
Sr. Presidente de la República, haga cumplir la Constitución y Las Leyes, reubique Gas del Caribe.