Las montañas lencas de La Esperanza en Honduras volverán a ser centro de debates nacionales entre el 12 y el 14 de marzo próximos, esta vez en el camino hacia una Asamblea Popular Constituyente.
Por Florencia Copley*
El II Encuentro Nacional por la Refundación de Honduras, convocado por organizaciones y movimientos sociales que forman parte del Frente Nacional de Resistencia, se propone compartir las propuestas de los hondureños y hondureñas para la construcción del poder popular y su ejercicio.
Casi nueve meses pasaron del Golpe de Estado militar que destituyó violentamente al presidente Manuel Zelaya Rosales que se encontraba intentando llevar adelante una encuesta de opinión a través de la cual se le consultaría a la ciudadanía si deseaba que en las elecciones de noviembre de 2009 se colocara una cuarta urna (las otras tres corresponden al Presidente, a los diputados y a los alcaldes) para votar por la instalación de una Asamblea Nacional Constituyente en el 2010, cuyo fin primordial sería la elaboración de una nueva Constitución de la República. 14 mil urnas y un millón de personas se movilizaron para esta consulta que no pudo llevarse adelante y que sin dudas fue uno de los desencadenantes del Golpe.
Según las declaraciones realizadas recientemente por el presidente constitucional Manuel Zelaya en su visita a Venezuela, otro de los motivos de su ilegítima destitución fue la intención de utilizar como aeropuerto civil parte de las instalaciones de la Base Militar estadounidense "Enrique Soto Cano" en Comayagua, conocida como Palmerola. En dicha Base aterrizó para cargar combustible el avión que llevaba secuestrado al presidente Zelaya hacia Costa Rica después de haber sido sacado a la fuerza de su casa en la noche del domingo 28 de junio del 2009. El ex mandatario reveló que luego de dos años de gestión finalmente había logrado un permiso del Estado norteamericano para el uso del aeropuerto y se tenía previsto comenzar las licitaciones para la construcción de las obras necesarias el 1º de julio del 2009 (tres días después del Golpe). Por supuesto, este proyecto fue olvidado por el actual gobierno de Honduras.
Unos meses antes del derrocamiento del presidente Manuel Zelaya, en octubre del 2008, se realizó en la ciudad de La Esperanza el II Encuentro Hemisférico frente a la Militarización y de allí partieron en caravana representantes de organizaciones y movimientos sociales de Honduras y de otros países de América en una histórica movilización hacia la Base militar de Palmerola en repudio de la presencia de soldados estadounidenses.
Hoy, desafiando la persecución y las violaciones a los derechos humanos de las que son víctimas los dirigentes sociales y el pueblo hondureño que se manifiesta en contra de la dictadura -disfrazada de democracia desde la asunción de Porfirio Lobo-, el Movimiento por la Refundación de Honduras, el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia (MADJ) y las Feministas en Resistencia (FER) decidieron dar continuidad al espíritu de rebeldía instando a participar de la refundación de Honduras a quienes deseen construir con el poder del pueblo aquella Asamblea Constituyente que quedó inconclusa.
El Golpe de Estado en Honduras fue un alerta para los otros países de América Latina que se alinearon a Venezuela y a Cuba, se sumaron al ALBA, a los procesos asamblearios, a la participación verdadera y a un espacio nuevo para los sectores siempre olvidados. Pero el pueblo hondureño no tiene miedo y se reúne para debatir nuevas propuestas, porque pese al terror saben que sus muertos no son en vano y que el futuro del país depende de la fortaleza de hombres y mujeres valientes que frente a la tiranía se declaren libres y construyan el poder desde abajo.
*Periodista y documentalista de Nuestra América (Nuestraamerica.info)