jueves 17 de septiembre de 2009

Militares llegan en bus a secuestrar banda del Instituto central Vicente Cáceres

de defensoresenlinea.com

Militares en complicidad con policías llegaron al Instituto Central Vicente Cáceres a secuestrar la banda y sus instrumentos, para llevarlos por la fuerza a presentarse al Estadio Nacional, donde se encontraban los golpistas, como parte de la celebración del 15 de septiembre.
El Consejo de Profesores de ese colegio había decidido que la banda integrada por unos 35 jóvenes estaría participando en la marcha del Frente Nacional de Resistencia y no con la programada por la autoridades golpistas, encabezadas por Roberto Micheletti..

Sin embargo en momentos en que estaban preparados tanto la banda como los maestros a trasladarse al Boulevard Morazán donde se desarrollaba una multitudinaria marchas con miles y miles de participantes, los militares llegaron y amenazaron a los alumnos que si no se subían a un bus militar para irse a presentar a Estadio tendrían problemas y serian detenidos.

Roberto Ordóñez, director del Instituto Central relató que los militares se prestaron a secuestra la banda del Central, “llegaron en un bus con la bandera nacional custodiada por militares, les quitaron los instrumentos de la banda y les dijeron no se suben a la banda en este bus, los llevamos detenidos, esto no había pasado ni siquiera en los ochentas”.

Varios maestros del ese colegio llegaron a auxiliar a los alumnos, pero cinco de ellos fueron golpeados: Fabio Rivera, Antonio Alarcón, Andrés Martínez y Julio Salas.

Fabio Rivera relató que “venimos a la institución para saber qué pasaba con un bus de profesores que íbamos para la marcha, al bajar del bus empezaron a agredirnos de un bus del ejecito donde habían militares

Empezaron a agredir a un compañero, Antonio Alarcón, lo tenían en el suelo yo me metí para defenderlo y me golpearon con una piedra en la oreja, en ese momento habían llegado unos ocho policías que solo se dedicaron a observar”.

Al profesor Antonio lo golpearon en la mandíbula con piedras y lo agarraron a patadas cuando estaba en el suelo.

Al lugar llegò Bertha Oliva, Coordinadora del comitè de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH, quien les hizo un llamado a los uniformados para que paren las violaciones a los derechos humanos porque que deben de entender que este pueblo es digno y que está demandando y exigiendo ser respetado.

“Lo que hoy han hecho con la banda del Central es un secuestro, son actos delictivos. deben devolver los instrumentos , lo han hecho a la luz del día con muchos ojos puestos, de nada les sirve que hayan hecho eso golpear y perseguir a los que han decidido dar un grito al mundo para que sepan lo que está pasando”, agegò la defensora de los derechos humanos.

Les advirtió a los responsables de esta acción que es un acto de violación a los derechos humanos, el cual será documentado y se reportará al mundo para que los involucrados respondan un día por sus actos.

Además criticó que a los golpistas no les ha bastado secuestrar al presidente de la república matar gente inocente que ha decidido no callar, torturar, violar mujeres , ahora se va contra la cultura del país, por lo que deben de parar esto.

Al lugar llegó la Fiscal Especial de los Derechos Humanos, Sandra Ponce, quien ni siquiera tomó nota de los relatos de los maestros.

La misión principal de esta Fiscalía es ejercer la acción penal contra los involucrados en violaciones a los derechos humanos, sin embargo el papel funesto que ha jugado en el marco del golpe de Estado ha dejado en indefensión a las víctimas.

Desde el 28 de junio en que se llevó a cabo el golpe de Estado militar-civil contra el presidente Constitucional, Manuel Zelaya Rosales, esta Fiscalía no ha emitido ningún requerimiento fiscal los responsables de violaciones a los derechos humanos.

Pero el Ministerio Público sí se ha esmerado en emprender procesos contra personas que participan en manifestaciones pacíficas, violentándoles el Debido Proceso. Hasta ahora son 38 los procesados por delitos políticos, entre ellos Sedición y participación en manifestaciones ilícitas, las pruebas no son contundentes pero aún así los jueces han dictado auto de prisión en su contra.