Tegucigalpa. La Voz.com. junio 24, 2008
Unos 1.500 miembros de 48 comunidades indígenas, que exigen tierras al gobierno, impedían el paso este martes por segundo día consecutivo al parque arqueológico más importante de Honduras que preserva los vestigios de la antigua civilización maya."Desde hace once años el gobierno nos ofreció tierras para cultivarlas y no nos ha cumplido", dijo en rueda de prensa el consejero mayor de la etnia chortí, Manuel Mancía.Indicó que "nuestro pueblo enfrenta serios problemas de alimentación, lo que no interesa al gobierno. Por eso, estaremos aquí hasta lograr nuestros propósitos".Informó que los chortí exigen al Estado unos 5,45 millones de dólares para comprar alrededor de 2.700 hectáreas. "Y, al recibir el dinero, entregaremos el parque arqueológico de Copán", añadió.Armados de palos y machetes, los indígenas impiden el ingreso de turistas al lugar, a unos 300 kilómetros al oeste de Tegucigalpa, en las cercanías de la frontera con Guatemala.Los indígenas han realizado acciones similares tres veces desde 1997.En mayo de 1997, el extinto ex presidente Carlos Roberto Reina (1994-1998) se comprometió a dar 14.700 hectáreas a campesinos e indígenas de la región oeste de Honduras, luego de que ellos ocuparon por cuatro días el parque arqueológico.Los indígenas hicieron lo mismo en abril de 2007."Pero han pasado los años y no ocurre nada... y ya estamos cansados de las mentiras gubernamentales", subrayó Mancía.El administrador del centro, Oscar Cruz, dijo que "enfrentamos pérdidas económicas incalculables con el cierre de este centro turístico y científico. La situación también repercute en la ciudad cercana de Copán porque los turistas la están abandonando".Al menos 400 turistas de Estados Unidos y Europa acuden diariamente a las Ruinas de Copán y pagan 15 dólares por entrar.Entretanto, los manifestantes son vigilados a la distancia por efectivos armados de la policía y el ejército.El gobierno dijo en un comunicado que envió a Copán una comisión especial para negociar con los protestantes.En Honduras existen siete pueblos indígenas dispersos en 100 comunidades y que agrupan más de 400.000 miembros: tolupanes o xicaques, lencas, pech o payas, misquitos o zambos, garífunas o caribes negros, tawahkas o sumus y chortí.Los chortí, sin embargo, descienden de los mayas y están emparentados con los chontales de Tabasco y los choles de Chiapas, en México.El imperio maya desapareció misteriosamente tras extenderse en lo que ahora son los territorios de México, Belice, Guatemala, El Salvador y Honduras. Alcanzó su punto de mayor desarrollo en los años 250 y 900 después de Cristo.Las ruinas de Copán fueron descubiertas por el español Diego García de Palacio en 1576.Los mayas lograron grandes adelantos en materia de astronomía y matemáticas, construyeron alrededor de 116 enormes ciudades y desarrollaron el más complejo sistema de escritura del Nuevo Mundo.
Unos 1.500 miembros de 48 comunidades indígenas, que exigen tierras al gobierno, impedían el paso este martes por segundo día consecutivo al parque arqueológico más importante de Honduras que preserva los vestigios de la antigua civilización maya."Desde hace once años el gobierno nos ofreció tierras para cultivarlas y no nos ha cumplido", dijo en rueda de prensa el consejero mayor de la etnia chortí, Manuel Mancía.Indicó que "nuestro pueblo enfrenta serios problemas de alimentación, lo que no interesa al gobierno. Por eso, estaremos aquí hasta lograr nuestros propósitos".Informó que los chortí exigen al Estado unos 5,45 millones de dólares para comprar alrededor de 2.700 hectáreas. "Y, al recibir el dinero, entregaremos el parque arqueológico de Copán", añadió.Armados de palos y machetes, los indígenas impiden el ingreso de turistas al lugar, a unos 300 kilómetros al oeste de Tegucigalpa, en las cercanías de la frontera con Guatemala.Los indígenas han realizado acciones similares tres veces desde 1997.En mayo de 1997, el extinto ex presidente Carlos Roberto Reina (1994-1998) se comprometió a dar 14.700 hectáreas a campesinos e indígenas de la región oeste de Honduras, luego de que ellos ocuparon por cuatro días el parque arqueológico.Los indígenas hicieron lo mismo en abril de 2007."Pero han pasado los años y no ocurre nada... y ya estamos cansados de las mentiras gubernamentales", subrayó Mancía.El administrador del centro, Oscar Cruz, dijo que "enfrentamos pérdidas económicas incalculables con el cierre de este centro turístico y científico. La situación también repercute en la ciudad cercana de Copán porque los turistas la están abandonando".Al menos 400 turistas de Estados Unidos y Europa acuden diariamente a las Ruinas de Copán y pagan 15 dólares por entrar.Entretanto, los manifestantes son vigilados a la distancia por efectivos armados de la policía y el ejército.El gobierno dijo en un comunicado que envió a Copán una comisión especial para negociar con los protestantes.En Honduras existen siete pueblos indígenas dispersos en 100 comunidades y que agrupan más de 400.000 miembros: tolupanes o xicaques, lencas, pech o payas, misquitos o zambos, garífunas o caribes negros, tawahkas o sumus y chortí.Los chortí, sin embargo, descienden de los mayas y están emparentados con los chontales de Tabasco y los choles de Chiapas, en México.El imperio maya desapareció misteriosamente tras extenderse en lo que ahora son los territorios de México, Belice, Guatemala, El Salvador y Honduras. Alcanzó su punto de mayor desarrollo en los años 250 y 900 después de Cristo.Las ruinas de Copán fueron descubiertas por el español Diego García de Palacio en 1576.Los mayas lograron grandes adelantos en materia de astronomía y matemáticas, construyeron alrededor de 116 enormes ciudades y desarrollaron el más complejo sistema de escritura del Nuevo Mundo.